Editorial: “Al borde”
Julio D. Cuevas Morales
Presidente del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de la provincia de Guadalajara
Coordinador Médico del CEDT de Azuqueca de Henares
No hacen más que comunicarme mis compañeros que están al borde, al reborde diría yo de sus fuerzas. No les cabe ni una responsabilidad mas en su quehacer diario. Ahora da igual de qué escalón sanitario hable, Atención Primaria u Hospitalizada, todos coinciden. La Atención Primaria no ha sido reforzada pero sí está forzada, y ahora más que nunca con muchos compañeros disfrutando de su merecido descanso y todo recayendo en los que están, en los que se han quedado. Parece claro que la situación no es la misma que en marzo y abril, pero las plantillas mermadas por tantos años de recortes en sanidad, el sobreesfuerzo que supone una pandemia de este tipo y ahora las ausencias ganadas a pulso por el personal sanitario, hace que la Sanidad Pública esté al borde del colapso profesional.
En el Hospital están igual, gente de vacaciones y los MIR de primer año que no se incorporan hasta septiembre, con el cúmulo de guardias que esto supone que hay que cubrir por una plantilla mermada.
Nuestra sanidad si no es la mejor del mundo está entre las mejores, pero como bien dicen los expertos, por la calidad profesional que atesoramos. Pues bien, estos profesionales son seres humanos, y como tal tienen un límite y éste está cerca, más cerca de lo que sería deseable.
Desde el Ilustre Colegio de Médicos de la Provincia de Guadalajara instamos a los responsables sanitarios de la Comunidad Autónoma de Castilla la Mancha a que redoblen sus esfuerzos en paliar los déficits que tenemos en personal de todos los estamentos, incluso en rastreadores.
En los Centros de Salud se están haciendo un sinfín de PCR, en el CEDT de Azuqueca de Henares y sus Consultorios Locales empezamos por agendas de 10 al día, pero ahora estamos haciendo más de 25 diarias. Para que esto sea efectivo hacen falta rastreadores suficientes para el seguimiento, y sobre todo personal de enfermería para atender esta demanda.
Los compañeros del Hospital se quejan de que les llegan pacientes que no tenían que acudir a ese escalón asistencial, seguramente porque en Atención Primaria ya no llegan a más por la falta de personal. Sé por información directa, que hay días que llegan a 70 citas, y casi todos los días sobrepasan su horario laboral por ese concepto que tenemos de atender a todo el mundo, pero el tiempo y el cerebro de los profesionales da para lo que da.
Hay muchas cosas que hay que mejorar, la principal los recursos humanos. Sin ese tesoro nuestra sanidad no puede evolucionar y seguir mejorando. También pedimos a las autoridades sanitarias, campañas de información a la ciudadanía, que sepan lo que estamos haciendo. La población cree que estamos de brazos cruzados, pero hay que explicarles que la nueva forma de atención tiene que ser telefónica por su seguridad y por la nuestra. Los Centros de salud y los Hospitales no son locales de ocio; allí las personas acuden enfermas, por eso extremamos las precauciones para evitar contagios.
En este sentido, es necesario reforzar la parte técnica de la telefonía para que sea capaz de admitir mas entradas, promover las videollamadas y toda la jurisprudencia necesaria para que esto sea legalmente aceptado.
En fin, hemos tenido que pasar a la era digital de golpe, sin periodo de adaptación, las cosas han venido así.
Para terminar, animo a las autoridades sanitarias a que sigan trabajando en mejorar esta situación. Ya sé que están en ello, pero no está de mas que se les aliente y refuerce en su trabajo, al igual que no estaría de mas que también ellos alienten y refuercen a los profesionales sanitarios y no sanitarios de alguna forma que nos haga echar algún paso atrás y alejarnos del “reborde” de nuestras posibilidades tanto físicas como mentales.
Por último, me gustaría recordar a toda la población la importancia de cumplir con las recomendaciones sanitarias: uso de la mascarilla, distancia social y lavado frecuente de manos, tres sencillos gestos que pueden salvar muchas vidas.