Importancia del Reconocimiento Médico en la actividad Física y en el Deporte
Dra. Dña. María José Nadal Blanco, vocal de Atención Primaria Urbana del Colegio de Médicos de Guadalajara y Coordinadora del Centro de Salud Cervantes. (Publicación 16/010/2015)
El principal objetivo de los reconocimientos médicos deportivos es detectar alteraciones, fundamentalmente cardiovasculares, que pueden poner en riesgo, la vida de la persona que practica deporte y/o hace actividad física. La más peligrosa, es la muerte súbita del deportista (MSD) que consiste en el fallecimiento de la persona, de forma inesperada y por causas naturales, durante las 24 horas siguientes a la práctica de una actividad deportiva que, en el 90% de los casos, ha sido de tipo recreativo
La MSD es más común de lo que se piensa. En mayores de 30 años 5/100.000 fallecimientos/año son debidos a la MSD. En niños y adolescentes se producen 15 MSD por cada millón de fallecimientos al año
Habitualmente la MSD es de origen cardiovascular. La lesión de las arterias coronarias es la causa más frecuente en los mayores de 35 años. Por eso es tan importante la investigación sistemática de los factores de riesgo cardiovascular (hipertensión, diabetes, colesterol, tabaco…) y la realización de una prueba de esfuerzo. En las personas menores de 35 años que practican deporte, la MSD, suele estar relacionada con alteraciones estructurales del corazón, por eso, es básico incluir un electrocardiograma de reposo e incluso un eco-Doppler cardiaco en el reconocimiento médico deportivo de los más jóvenes. Es importante considerar que, un 0.3% de los adolescentes y de los adultos jóvenes tienen alteraciones estructurales del corazón que predisponen a la muerte súbita y, que el deporte, multiplica en un 2.5 el riesgo de que se produzca una MS
En nuestro medio, la medida más útil para prevenir la MSD, es la realización sistemática de reconocimientos médicos deportivos (RMD) antes de empezar a practicar cualquier actividad física o deportiva. Este RMD debería incluir siempre, como mínimo, un electrocardiograma de reposo. También sería prudente plantearse la realización sistemática de una prueba de esfuerzo en los mayores de 35 años (esta medida ya ha sido adoptada por la Federación de Futbol de Castilla-La Mancha) y de un eco-doppler cardiaco en los menores de 35 años. En Italia, la obligatoriedad del electrocardiograma en los RMD ha disminuido la prevalencia de MSD en un 89%
En cuanto a las recomendaciones existentes en el momento actual sobre los RMD merece la pena destacar que el Consejo Superior de Deportes y la Sociedad Española de Cardiología Pediátrica aconsejan realizarlos a todos los niños y adolescentes que practiquen cualquier deporte desde los 6 a los 18 años. Por su parte, la Federación Internacional de Medicina del Deporte recomienda hacerlos sistemáticamente a cualquier persona mayor de 35 años que vaya a iniciar una actividad física y/o deportiva aunque sea de carácter recreativo. A su vez, la Sociedad Española de Medicina del Deporte insiste en el RMD anual, con independencia de la edad, en todos los deportistas federados y en todas las personas que practican ejercicio físico de intensidad moderada y alta
La mayoría de las personas e incluso los propios médicos no somos conscientes de la importancia preventiva tan importante que tienen los RMD. Son muy pocos los que se plantean que su hijo debería hacerse un RMD antes de empezar los entrenamientos del deporte que habitualmente practique, son muy pocos los que se plantean hacerse un adecuado RMD antes de apuntarse al gimnasio, a una clase de un centro social o a un curso de natación…a veces ni siquiera los propios deportistas, ni las federaciones ni los clubs son conscientes de lo importante que es el RMD para garantizar la salud del deportista. Esperemos que poco a poco los RMD adquieran la importancia que realmente tienen.