La obesidad, la pandemia silenciosa del siglo XXI
Autor: Pablo Arteaga Asensio, R4 de cirugía general en hospital de la PAZ, Madrid.
¿Qué tienen en común la hipertensión, el colesterol alto, las enfermedades del corazón, la diabetes y algunos cánceres como el de páncreas o el de estómago?. La respuesta es la gran plaga del siglo XXI, la obesidad. Hemos conseguido controlar enfermedades tan letales como el VIH, la meningitis o determinados cánceres como el de mama; enfermedades que hace 30 años eran una sentencia de muerte para los pacientes. En 2019 en España, la obesidad y sus enfermedades relacionadas causaron la muerte a 131.000 personas, para que el lector se sitúe el COVID entre 2020 y 2022 ha matado a 116.000 personas.
¿Y cómo hemos llegado a esta situación? ¿Los médicos no hemos inventado ya la pastilla mágica para curar esta plaga?. La respuesta es NO, la obesidad es una enfermedad crónica que se desarrolla debido a que las calorías ingeridas superan a las que se necesitan de forma constante; sobre ese mecanismo simple pocas pastillas mágicas podemos inventar. El problema es que la sociedad debe hacerse cargo de su propia salud; la comida rápida (que todos disfrutamos), el sedentarismo, la promoción de determinados tipos de estilo de vida (ser obeso es una enfermedad y aunque nadie debe ser discriminado por ello, la persona obesa no esta sana), han ayudado a fomentar esta pandemia que tenemos. ¿Esto que quiere decir? Querido lector evidentemente usted se puede comer una hamburguesa en su cadena de comida favorita, como el que escribe hace de vez en cuando, pero usted debe de saber que esa comida no puede ser la base de su dieta. ¿Y como puedo saber si estoy obeso? La manera de determinarlo en la población general adulta (es decir el 90% del mundo, excepto embarzadas o culturistas), es dividir tu peso en kilos entre tu altura en metros al cuadrado, esto se llama índice de masa corporal o IMC; si te da 25 tienes sobrepeso, si te da 30 tienes obesidad. Pero me ha dado 27, me sobra unos kilos y eso no importa; en ese momento quizás no te provoque nada, pero comenzarás a ver que tu tensión sube y tu azúcar en sangre no se controla, y a la larga necesitarás medicamentos, pero esto se puede cambiar si perdieras peso bajo control de tu médico de atención primaria. Doctor el pediatra me ha dicho que mi hijo tiene sobrepeso ¿Eso no es malo no?; tu hijo o hija con obesidad o sobrepeso puede hipotecarse su crecimiento, puede tener una pubertad precoz, tener un crecimiento inadecuado o tener una diabetes precoz. Entonces la respuesta ante un niño obeso es la misma, ha de perder peso.
En resumen; el sobrepeso y la obesidad son la lacra y la pandemia de nuestro siglo; a los pacientes que ya han desarrollado las enfermedades derivadas de esta por desgracia no podemos evitarlas, pero a los que todavía no las han desarrollado pueden evitar consecuencias tan dramáticas como diálisis, transplante de higado o riñón, infartos, demencias o amputación de miembros. Con lo cual si piensan o saben que les sobra peso; sigan su peso de forma constante, con ayuda de un profesional sanitario establezcan una dieta saludable, intenten hacer ejercicio y no se desanimen si no ven resultados a corto plazo, porque estarán ganando muchos años de vida para ver los resultados y compartirlos con sus seres queridos.