Un invierno sin Gripe
Dra. Dña. María José Nadal, vocal de Atención Primaria Urbana del Colegio de Médicos de Guadalajara y Dra. en Medicina y Cirugía. Trabaja como coordinadora en el Centro de Salud de Cervantes. (Publicación 07/11/2014).
La gripe o influenza es una enfermedad infecciosa de aves y mamíferos causada por un virus. En las personas afecta a las vías respiratorias, cursando inicialmente como un resfriado aunque a las 24-72 horas comienzan los síntomas generales consistentes en fiebre alta, tos seca sin mocos, dolores musculares, de articulaciones y de cabeza, fiebre y tos. A veces, sobre todo en niños, también puede provocar náuseas y vómitos.
El pronóstico es bueno con una recuperación parcial a la semana y completa a los 15 días. Su complicación más importante es la neumonía, más frecuente en niños pequeños y en ancianos. Las complicaciones suelen ser consecuencia tanto del estado de salud como de la inmunidad existentes antes de la infección, por eso la gran importancia de la vacunación en las personas de riesgo.
La gripe cursa en forma de epidemias durante las cuales puede infectar del 10% al 20% de la población. Es especialmente frecuente en invierno. Debido a que el hemisferio norte y el hemisferio sur atraviesan esta estación en diferentes momentos existen dos temporadas de gripe cada año: de octubre a abril en el hemisferio norte y de mayo a septiembre en el hemisferio sur. Por eso la OMS (asesorada por los Centros Nacionales para la Gripe) recomienda dos formulaciones vacunales cada año, una para cada hemisferio.
La gripe se transmite desde las personas infectadas a través de gotas de aerosol cargadas de virus (procedentes de la saliva, los estornudos o la mucosidad nasal). Se contagia especialmente a las 48-72 horas del inicio de la enfermedad aunque puede ser contagiosa hasta los 10 días. Por eso son fundamentales para prevenir la enfermedad las medidas de higiene personal: lavado de manos y cubrirse la cara al toser o al estornudar. Para desinfectar las superficies es suficiente utilizar alcohol o lejía.
Es mucho más raro el contagio a través de las heces de los pájaros infectados (esto sólo ocurre en personas que vivan o viajen a zonas donde existe gripe aviar y tengan un contacto muy intenso con aves de corral y exposición muy importante a sus deposiciones)
Hay otras infecciones que pueden confundirse con la gripe, es lo que se conoce como diagnóstico diferencial. Hay que hacer diagnóstico diferencial especialmente con el resfriado común (los síntomas de la gripe aparecen mucho más rápido y son más intensos y duraderos que los del catarro), la faringitis estreptocócica (al principio pueden ser parecidos pero en la faringitis aparecen placas de pus) y con otros virus especialmente con adenovirus (el dolor de garganta es más intenso), enterovirus y arbovirus (no tienen tos y cursan frecuentemente con vómitos y/o diarrea). Este año muchas personas pensarán en el ébola. Distinguir gripe de ébola es muy fácil. Si no se ha viajado en las tres semanas anteriores a la aparición de la fiebre a un país donde haya epidemia de ébola es imposible el contagio. Para que exista contagio es necesario el contacto físico directo con una persona gravemente infectada y estos casos están ingresados en un hospital.
En la gripe sólo pueden tratarse los síntomas. Los antivirales (los conocidos Tamiflu y Relenza) tienen una eficacia muy limitada y bastantes efectos secundarios. Por ello la mejor medida frente a la gripe es la vacunación. La vacuna recomendada este año es VAXIGRIP. La protección contra la gripe aparece a las dos semanas de ponerse la vacuna. La vacuna se pone en los centros de salud y en los consultorios locales del SESCAM desde finales de octubre a finales de diciembre de 2014. Se recomienda pedir cita previa.
Se aconseja la vacunación especialmente a los siguientes grupos:
- Personas de edad mayor o igual a 65 años especialmente si viven en residencias
- Personas menores a 65 años pero que tienen alguna enfermedad importante que puede complicarse si se contagian de una gripe (la hipertensión arterial aislada no precisa vacunación): enfermedades respiratorias, diabetes, demencias, cáncer, inmunidad disminuida por fármacos o enfermedades…
- Los niños mayores a 6 meses que tengan una enfermedad crónica
- Las mujeres embarazadas (mejor si puede evitarse vacunar en el primer trimestre)
Personas que pueden contagiar la gripe a enfermos de especial riesgo
- Personal sanitario
- Personal de instituciones geriátricas o de centros de atención a enfermos crónicos
- Cuidadores de enfermos crónicos o de personas ancianas
Las personas que vivan en la misma casa (incluidos los niños a partir de los 6 meses) que personas cuyo estado de salud pueda complicarse si tienen gripe
- Personas que trabajan en servicios públicos esenciales: fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, bomberos, servicios de protección civil, personal de emergencias sanitarias y trabajadores de instituciones penitenciarias
Viajeros internacionales que viajen
- A zonas tropicales en cualquier época del año
- Al hemisferio sur entre los meses de abril a septiembre
- A zonas con gripe aviar
No se aconseja poner la vacuna en
- Niños menores de 6 meses
- Personas con alergia al huevo
- Personas que presentado una reacción alérgica tras la vacuna en años anteriores
Precauciones con la vacuna de la gripe
- Si existe fiebre o una infección más severa que un catarro se esperara a su mejoría para vacunar
- Las mujeres que están dando el pecho pueden vacunarse
- En embarazadas se intenta evitar el primer trimestre pero si la mujer tiene algún factor de riesgo puede vacunarse en el primer trimestre