Consejos alimentarios en la Infancia
Dra. Dña. Alicia Martín Flores, Vocal de Atención Primaria Rural, del Colegio de Médicos de Guadalajara (Publicación 14/11/2014).
La leche materna es el mejor alimento para el lactante durante los primeros meses de vida. La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses.
Entre los 6-9 meses los niños que tomen lactancia artificial deberán cambiar la leche tipo 1 a la tipo 2 o leche de continuación.
Tanto la edad de inicio de la alimentación complementaria (4-6 meses) como el orden de introducción de los diferentes alimentos puede variar en función de las necesidades de cada niño. Su pediatra o enfermera le informarán en cada caso del orden más adecuado.
Es importante tener en cuenta para la detección de posibles alergias que la introducción de los diferentes alimentos se debe realizar de modo individual esperando 3-5 días entre un alimento nuevo y el siguiente.
Los diferentes alimentos por los que se puede comenzar son:
- Cereales: La papilla de cereales se puede preparar con agua, leche materna o artificial. Los cereales sin gluten se
pueden introducir a partir de los 4 meses (si el pediatra lo cree necesario).Los cereales con gluten se deben introducir en pequeñas cantidades (algún cacito suelto añadido a los cereales sin gluten, o a la fruta, o algún trozo de galleta o pan que el niño puede ir chupando y comiendo), de forma gradual.
- Papilla de verduras preparación: Hervir en agua sin sal ni aceite durante 20 minutos judías verdes, puerro,
patata y zanahoria (poca cantidad).Usar referiblemente verduras y hortalizas frescas. Evitar remolachas, coles, espinacas, coliflor, espárragos y ajo hasta los 18 meses.
Hay que evitar el consumo de algunas verduras de hoja verde (espinacas, acelga, borraja) por su alto contenido en nitritos.
Finalizada la cocción, añadir un chorrito de aceite de oliva. Si se añade el aceite durante la cocción, pierde propiedades nutricionales.
Toleradas las verduras se pasa a añadir carne o pescado blanco. Pavo o pollo sin piel (más o menos medio muslo o contra muslo por ración) o un filete pequeño de pescado blanco y triturar.
No conservar más de 48 horas en nevera. Se puede congelar en porciones diarias (excepto la patata) e ir sacándolas según necesidades.
- Papilla de frutas: Utilizar fruta madura. Comenzar con plátano, naranja (recién exprimida), manzana y pera bien
lavados y triturados. El resto de frutas se puede introducir a partir de los 12 meses.
- 18 meses. Evitar la fresa, el kiwi y fruta de pelo (melocotón, albaricoque…) hasta los 18 – 24 meses (son más alergénicos).
No se recomienda añadir sacarina, azúcar, miel ni sal extra a las comidas. Tampoco se recomienda el uso de leche condensada. Todos estos aditivos favorecen el desarrollo posterior de caries o la adquisición de hábitos de alimentación perjudiciales en la edad adulta.
Durante el primer año de vida el niño necesita un aporte de medio litro de leche al día. Si no se alcanza esa cantidad con las papillas de cereales, de puede ofrecer pecho o biberón 20 minutos después de finalizados los purés, para que el calcio de la leche se asimile correctamente.
Otros consejos:
- Se puede ofrecer agua entre tomas, sobre todo en verano.
- No dar leche de vaca antes del año de vida (sí derivados lácteos).
- Las legumbres se introducen en torno a los 15-18 meses.
- El pescado azul (menos de 50 ramos por ración) se desaconseja especies como tiburón, atún rojo, lucio y pez
espada en menores de 3 años, por la cantidad de mercurio que pueden acumular.
- No ofrecer frutos secos, ni frutos pequeños (aceitunas, cerezas, dátiles) a menores de 5 años por riesgo de atragantamiento.
Alimentos desaconsejados:
- Caramelos (no antes de los 3 años) y chucherías en general.
- Picantes, especias fuertes, excitantes (café, cola, té…).
- Embutidos grasientos (salchichón, chorizo, salchichas…) no tienen beneficio nutritivo. Sí se pueden consumir
fiambres de pavo y pollo, así como el jamón serrano sin corteza ni grasa (salvo el de jabugo que es cardiosaludable).
- Patatas fritas industriales, así como aperitivos salados o dulces, por exceso de sal y grasa.
Nota:
Estas pautas son recomendaciones, siga los consejos de su pediatra y enfermera.